El jubilado acusado de enviar una carta bomba a Pedro Sánchez
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- 14 may 2024
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Agentes revelan detalles cruciales en el juicio sobre los paquetes explosivos enviados en 2022
El jubilado acusado de enviar una carta bomba a Pedro Sánchez

Madrid, 13 de mayo de 2024 - Durante la primera sesión del juicio relacionado con el envío de seis cartas bomba en 2022, incluyendo una dirigida al presidente del gobierno español Pedro Sánchez, los agentes encargados de la investigación han presentado pruebas determinantes que señalan a Pompeyo González, un jubilado residente en Miranda de Ebro (Burgos), como el presunto autor de los envíos.
El jubilado acusado de enviar una carta bomba a Pedro Sánchez
La importancia de las cerillas en la investigación
Entre las pruebas más destacadas presentadas ante el tribunal se encuentran 256 cerillas encontradas entre los restos de basura del domicilio del investigado. Según los agentes, estas cerillas tenían las cabezas raspadas, indicando su posible uso en la confección de los artefactos explosivos enviados en los paquetes.
Un análisis minucioso lleva al acusado
Los agentes explicaron cómo el análisis de los paquetes bomba y las pistas recopiladas, incluyendo el origen de los envíos y las compras de material a través de Amazon, condujeron a la ciudad de Miranda de Ebro, donde residía Pompeyo González. Las vigilancias en su domicilio y el análisis de su basura arrojaron evidencia adicional que lo vinculaba a los envíos explosivos.
Las acciones del acusado y su detención
Durante la investigación, los agentes observaron que el acusado adoptaba medidas de seguridad estrictas al salir de su casa, lo que levantó sospechas sobre su posible implicación en los hechos. Finalmente, González fue detenido, y aunque inicialmente negó su participación, las pruebas presentadas en el juicio han contribuido a estrechar el cerco sobre él.
La defensa plantea cuestionamientos sobre las cerillas
En medio del testimonio de los agentes, la abogada de Pompeyo González cuestionó el valor de las cerillas como evidencia explosiva, argumentando que no son consideradas explosivos según el informe de los especialistas. Sin embargo, el tribunal rechazó este cuestionamiento, destacando la importancia de las cerillas en el contexto de la investigación.
Un futuro incierto para el acusado
Con las pruebas presentadas en el juicio y la petición de la Fiscalía de una condena de 22 años de prisión por terrorismo, el futuro de Pompeyo González parece incierto. A medida que avance el juicio y se presenten más testimonios y pruebas, se espera que se arroje luz sobre este caso que ha conmocionado a la opinión pública española.
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